Taxistas de carros ‘Livery’ en NY piden ayuda y exigen más placas para su industria

NUEVA YORK Taxistas de carros ‘Livery’ en NY piden ayuda y exigen más placas para su industriaConductores y dueños de bases de taxis denuncian que su industria está en riesgo de desaparecer pues una reducción del 80% en los autos disponibles y el congelamiento de nuevos permisos por parte de TLC, hacen que comunidades sufran falta de transporte en 40% y ellos falta de trabajo

Esta es la conversación que cientos de usuarios de los llamados taxis “livery”, también conocidos en Nueva York como carros negros o limusinas ahora suelen tener al llamar a bases de taxi.

El servicio que solía dar esa industria, que llegó a contar con 30,000 vehículos en su época dorada, se ha visto seriamente reducido en la última década, y en especial desde el 2018 cuando la Ciudad optó por congelar la emisión de nuevas placas de servicio de autos públicos: ahora solo hay 5,100 chóferes disponibles.

Así lo denunciaron este lunes en las escalinatas de la Alcaldía de la Gran Manzana decenas de conductores como Santiago Cruz, quien a pesar de ser un chófer experto, no ha podido prestar sus servicios manejando taxis livery, por lo que pidieron a la Administración del Alcalde Eric Adams que les tienda la mano y haga que la Comisión de Taxis y Limusinas (TLC) emita nuevas placas para que puedan trabajar y echen a rodar más carros.

No venimos aquí a protestar. Venimos a decir que necesitamos ayuda. Medidas tomadas en la Administración anterior pusieron límite en los carros livery, algo que nos está estrangulando porque no nos dan la opción de reemplazar a conductores que han muerto, o que se han pensionado o retirado para que podamos sacar nuevas placas”, aseguró José Altamirano, presidente del la Asociación de Propietarios de Bases Livery de NY (LBO). “Nuestra industria se ha visto reducida en 80% en los últimos 8 años y queremos implorarle a TLC que nos de más placas para que se recuperen los vehículos que se fueron”.

El activista de los taxistas livery aseguró que el impacto en esa reducción de carros y conductores “livery” ha tenido un doble impacto en la falta de opciones de empleo para chóferes, gran parte de ellos inmigrantes y latinos, y en comunidades vulnerables, donde no llega el transporte público, que han perdido buena parte del servicio. Más del 40% de las llamadas que entran a las bases de taxi “livery” no se contestan, porque no hay vehículos suficientes.

EL DIARIO NY