Por Islandia Reynoso
Periodista
Tras la Pandemia Covid 19, estas interrogantes siempre han estado presente en la sociedad dominicana por varios factores de cultura, tal vez que están en espera de una transformación.
El primer cambio es aceptar cuando es necesario visitar un psicólogo o en su defecto un Psiquiatra.
Luego aceptar que estamos pasando por una condición y es necesario la intervención y ayuda profesional y de los demás.
Transformar la sociedad para que desplazar el bullying, que contribuye a las personas a desarrollar aún más un trastorno de salud mental.
Los problemas de salud mental aumentan en República Dominicana, por la deficiencia de salud primaria en el área de psiquiatría.
Antes de la plaga del coronavirus, recordamos los altos costos económicos, globales y el bajo presupuesto de Producto Interno Bruto, destinado a la salud mental de tan solo 2% del PIB donde el 85% de las personas con trastornos, no reciben atención.
Sin embargo la pandemia ha afectado significativamente la salud, los objetivos personales , familiares propuestos e individualmente que resultaron fallidos, se resumen en frustraciones que afectan a las personas emocionalmente y luego su salud mental.
Resaltar que al inicio de esta convivencia no existía atención médica, para la salud primaria menos para la salud mental, todo se resumió en cuarentena, todos los estándares rígidos que se debían cumplir sin recordar, la alimentación, la salud,la educación, tiempo de recreación.
Las anteriores se resumieron en medidas que habían que cumplir lo que fue dando paso al gran problema presente en las calles, aún sin respuestas proceso que tal vez con atención a tiempo tendrían soluciones, pero lamentablemente el tiempo ha incurrido y aumentado estas problemáticas que se salen de control.
Por lo cual el aumento de los trastornos de salud mental pueden ser el resultado de otra pandemia, tras el covid 19, el temor a contagiarse , el aislamiento, el tema de uso constante de mascarillas, el duelo, las personas que perdieron seres querido sin la oportunidad de despedirlos, situaciones que han afectado emocionalmente a las personas y provocan sensibilidad humana, esta son las situaciones que han aumento los trastornos de salud mental.
También la pérdida de ingresos y los compromisos personales que permanecen por cumplir son otros motivos que han llevado de las manos a las personas, a padecer trastornos mentales.
Al momento lo importante es el covid 19, la variante y el proceso de vacunación, el número de contagiados y fallecidos, dejando atrás el hambre, la situación económica, política y el tema de inseguridad social, que afecta directamente la sociedad afectando la salud mental de los más débiles, arrastrándolos primero, emocionalmente hasta la depresión antesala de la locura y las muertes suicidas.
Sin embargo, la nueva pandemia crece significativamente.
La OMS publicó las altas estadísticas sobre la salud mental que indica que para el 2020, sólo 51% de 194 estados miembros tenían un plan Nacional para la prevención de la salud mental, es importante resaltar que al inicio de la pandemia la Organización Mundial de la Salud (OMS ), advirtió que la crisis del coronavirus, afectaría la salud mental de muchas personas en el mundo y que se podría general un aumento.
Pues les cuento acertaron, para octubre del 2020 con motivo Del Día Mundial de la Salud Mental, la OMS publicó un estudio que indicaba que la pandemia había provocado un aumento de la salud mental que a un año sigue aumentado significativamente y como consecuencia los servicios esenciales de la salud mental habían quedado paralizados por motivos de cuarentena.
Los escenarios en las calles son diversos, pero todos tienen en común una triste condición, su salud mental está afectada y deambulan por las calles como un camino sin peligros, donde vehículos no son obstáculos al momento de caminar o cruzar las vías.
Los puentes, esquinas y elevados de la capital, se han convertido en sus hogares, tener una vida nómada lo ha conllevado a adoptar un lugar cualquiera para realizar sus necesidades fisiológica, además se alimentan de desechos que encuentran en la basura o de la caridad de lo que se motivan a extenderles una mano solidaria.
Las personas con esta enfermedad viven una realidad que los encierra en sus propios ser, a pesar de su inestabilidad mental se muestran dócil y sonríen, en cambio otros no pueden evitar una actitud agresiva y de rechazo.
Es la triste realidad que enfrentamos al desplazarnos en las vías, un grupo incontable de enfermos mentales abandonados a su suerte por sus familiares y su gobierno agravando cada día más su salud mental, sin alimentación ni tratamientos estos casos de la sociedad no pueden quedar sin respuestas.
El gobierno dominicano debe financiar responsablemente los costos para resolver estas problemáticas que afecta a todos.
El Ministerio de Salud Pública orientarse a extender más programas en todo el país, como El Centro de Rehabilitación Psicosocial que presta una ardua labor de compromiso, amor y profesión para detener y tener un control de los enfermos mentales.