Desde marzo de este año la mansión en Malibú que en el pasado le perteneció a Cindy Crawford ha sido noticia. Primero lo fue al entrar al mercado de bienes raíces, luego hubo información falsa sobre una posible venta y ahora se sabe que Kim Kardashian es la nueva propietaria.
La socialité y empresaria de 41 años pagó $70.4 millones dólares por la propiedad que entró al mercado en marzo con un costo de $99.5 millones de dólares.
Se debe recordar que en agosto también se difundió una noticia en la que se aseguraba que la propiedad había sido vendida por $89.75 millones de dólares, pero eso fue falso.
Esta compra se suma a una serie de movimientos que Kardashian está haciendo en el mercado de bienes raíces. Uno de esos movimientos ha sido sobre su mansión de repuesto en Hidden Hills, la cual ha puesto en venta por $5.3 millones de dólares.
La nueva mansión de Kardashian es una de las zonas más exclusivas de Malibú, fue propiedad de Crawford hasta 2018 cuando la vendió por $45 millones de dólares a Adam Weiss y su pareja Barret Swatek.