ROMA.- El fotógrafo dominicano Onorio Montás dictó una conferencia científico-cultural acerca del origen de la dominicanidad en la sede del Instituto Italo-Latinoameriano (IILA), destacando la evolución del proceso histórico de la isla Hispaniola hasta los más recientes descubrimientos arqueológicos.
Acompañó al embajador dominicano en Italia, Tony Raful Tejada, quien tuvo el discurso central del encuentro realizado la pasada semana, en el que participaron embajadores acreditados ante el gobierno de Italia y dominicanos residentes, así como invitados del país anfitrión.
Montás, interesado permanente de los temas históricos, políticos y culturales de la República Dominicana, inició su disertación con la famosa quintilla de Fray Juan Vásquez que reza: “Ayer español nací, A la tarde fui francés, A la noche etíope fui, Hoy dicen que soy inglés, No sé qué será de mí.”
Expresó que esa quintilla es una viñeta angustiosa de las vicisitudes de la dominicanidad para cuajar una identidad propia.
“Y Fray Juan Vásquez, un personaje dominicano del siglo XVII, en cierto modo la rúbrica con su propia vida, porque este frailecito de Dios murió quemado en su iglesia de Santiago de los Caballeros, durante la invasión haitiana de 1805”.
Indicó que la incertidumbre que la quintilla expresa la ha convertido en una cita recurrente de las interpretaciones históricas que han estudiado las luchas de las potencias europeas a partir del siglo XVII.
Montás relató en su conferencia que en el año 1982 fue convocado por el intelectual dominicano Bernardo Vega historiador, antropólogo, investigador y apasionado conocedor y coleccionador de piezas taínas, para discutir una idea que tenía sobre un libro que le interesaba publicar sobre la cultura Taína.
“Analizamos la idea y convocamos al historiador Frank Moya Pons y al arquitecto Pedro José Borrell Benz, quién era aficionado a la fotografía y conservaba algunos viejos negativos de pictografías de las diferentes cuevas de nuestro país”, apuntó.
Manifestó que propuso que el libro fuera de fotos en blanco y negro por considerar que el dramatismo de las piezas no resistía el color, pues eran piezas monocromáticas en madera talladas o en piedra. Así se hizo.
“El resultado fue un bello libro en blanco y negro y, aunque casi la totalidad de fotos fueron realizadas por mí, aparecen varias que necesariamente debían ser incluidas como el “Cemí de Algodón” actualmente se exhibe en Turín, Italia y otras piezas en el de La Habana Cuba, en Saint Lois, Missouri, New York, San Juan, Puerto Rico, Washington D. C., California E.U., Firenze Italia, Roma Italia, Londres Inglaterra, Múnich Alemania y Viena Austria, el resultado su libro “Arte Taíno”.
El cazador de imágenes dijo que el libro fue publicado en su primera edición en 1983 con una presentación de Bernardo Vega y una introducción del doctor Frank Moya Pons y las fotos de la pictografías de Borrell Benz, luego la segunda reimpresión por el Gobernador del Banco Central de la República Dominicana Hugo Guilliani Cury y dos reimpresiones más.
Montás aprovechó y viajó a Torino, al “Museo de Antropología y Etnografía de Torino de la Universitá di Torino”, en donde sostuvo una interesante conversación con el Rector Stefano Geuna de esa alta casa de estudios sobre nuestro Zemí de Algodón y tuvo la oportunidad de tomar imágenes de dicha importante pieza arqueológica para su próximo libro en el que trabaja.
En su ponencia Montás habló del primer contacto entre europeos e indígenas, que se produjo el 12 de octubre de 1492 cuando los descubridores se encontraron con los llamados «lucayos» al arribar a la isla Guanahaní, localizada en el archipiélago de las Bahamas y bautizada con el nombre de San Salvador por los españoles, quienes también se refieren a estas últimas como Lucayas. Denominación que se deriva, precisamente, del nombre de sus primeros habitantes. Sobre este episodio nos dice el Almirante en el diario de navegación de su primer viaje.
En su relato destaca cómo el Almirante en el diario de navegación de su primer viaje describe la sociedad de los taínos, su vida, costumbre, conducta y retrata los rasgos físicos de los aborígenes.
Finalmente informa que el arqueólogo Adolfo López, desde hace más de cuatro años, lidera el grupo que investiga el origen de los primeros pobladores de la isla Hispaniola. Un grupo de arqueólogos dominicanos descubrió mediante excavación un cementerio antiguo en la zona oriental de la península de Samaná, específicamente en El Cabo, al nordeste de República Dominicana.
Explicó que el hallazgo, que se estima tiene una antigüedad de entre 3,000 y 4,000 años, se produjo hace varios años, mientras un equipo dirigido por el Profesor de Antropología de la Universidad de Roma, Alfredo Coppa junto a un equipo trabajaba en otro proyecto de investigación. El grupo busca el origen de los primeros pobladores de la isla.