Está siendo un verano muy caluroso en todo el mundo. Y en la ciudad de Nueva York, el calor no solo ha repercutido en el comportamiento de los humanos, sino también en el de las ardillas.
Estos animalillos han sido vistos tumbados boca abajo con los brazos y las patas estiradas en los diferentes parques neoyorquinos, intentando refugiarse de los rayos del sol.
Ante tal peculiar posición, aquellos paseantes que han podido ver a las ardillas así, no han dudado en hacerles fotos y publicarlas en las redes sociales.
Resulta que esta postura, aunque parezca incómoda, es saludable para los animales y es una de las formas que les ayuda a refrescarse en medio del calor extremo del verano